Piensas en como engordar lo que tienes. No es mas ni menos que lo que pueden tener cientos de compañeros de Universidad. Continuamente te obligan a marcar la diferencia.
Te empiezas a plantear que te espera un maravilloso mundo de codazos, puntapiés, y demás artimañas del estilo. Tragas saliva. Duermes ¿por qué no te has pasado
Es imposible.
Pero a veces ves cosas que te hacen recobrar la ilusión:
"(...)todo se reduce a una cosa. La sorpresa. Publicidad, diseño... Todo es lo mismo. En el instituto un día nos dieron triángulos, rectángulos y círculos para que diseñáramos algo. Todo el mundo se puso a juntarlos, a darles vueltas... Y yo quieto. El profesor estaba furioso conmigo. Cuando acabó el ejercicio le di la hoja de papel en blanco, con mi nombre justo en el borde y se la di. Al día siguiente, me felicitó. Porque siempre, siempre debes sorprender a la gente. Haz algo diferente. Y nunca hagas revistas para los lectores, hazlas para ti. Porque hay miles de publicaciones. ¿Y por qué te van a comprar? Pon pasión"
Son señales, o no son nada.
Texto extraido de El País
5 comentarios:
El lema es: Habrá alguién mejor que yo, pero como yo ninguno.
También es aplicable a los melones.
G.
O por subvención, como El País, aunque pierdas cientos de millones al año.
Siempre estar con el poder ayuda.
Tu nueva estética me gusta.
Mucho,
saludos.
Me gusta mucho.
Un saludo.
Jode me ha gustado mucho... Yo no se dibujar pero una vez en el instituto todo el mundo dibujo un paisaje y yo solo un arbol y me dijeron que era muy simple... Me cabree un monton
Sí, sí, sí. Al fin y al cabo, absolutamente todo está justificado si la justificación no carece de lógica :)
Y sólo tenemos una manera de marcar la diferencia, como tú dices, que es sorprender, siempre sorprender. Cada vez importa menos el camino que tomes para conseguirlo.
Besos;)
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